70% de los trabajadores de la economía formal no tiene empleo decente
La OIT fija parámetros de salario suficiente para cubrir las necesidades del empleado y su familia, lo que no ocurre en Venezuela, dijo el sindicalista Dick Guanique
15 DE OCTUBRE 2016 - 12:01 AM
La Organización Internacional del Trabajo tiene una serie de parámetros para determinar el empleo decente: recibir un salario digno y suficiente, un sistema de seguridad social que garantice la salud, recreación y pensión de vejez, entre otras. La inflación, la escasez, el desabastecimiento y la incapacidad del trabajador de cubrir sus gastos con el sueldo mínimo, evidencian que los criterios de empleo decente no se acatan en Venezuela.
“En Venezuela este lineamiento de la OIT no se cumple”, aseguró el sindicalista Dick Guanique, directivo de la Confederación de Trabajadores de Venezuela, quien sostuvo que como consecuencia de políticas laborales erradas del gobierno 70% de los trabajadores de la economía formal no llenan los requisitos del empleo decente establecidos por el organismo internacional.
Guanique destacó que de 6,5 millones de personas que laboran en el sector formal público y privado, 4,5 millones no devengan un salario suficiente para mantener los gastos del grupo familiar dentro del estándar de calidad de vida adecuado.
Guanique, que coordinó el Observatorio Laboral Venezolano en el convenio entre la CTV y la Central General de Trabajadores de España, precisó que esos 4,5 millones de personas ganan un salario mínimo (22.576,60 bolívares mensuales).
“De acuerdo con los criterios de la OIT, el empleo decente debe tener un salario digno y suficiente y un buen sistema de seguridad social que garantice a los trabajadores la salud, la recreación y la pensión de vejez adecuados. Ninguna de esas premisas se cumple cabalmente en Venezuela”, reiteró.
El organismo estableció el 7 de octubre como Día del Empleo Decente. Guanique destacó que la institución internacional se refiere a salario suficiente no de bonos porque estos no tienen incidencia en los otros componentes del sueldo como las prestaciones sociales, las vacaciones y las utilidades. “Sin embargo, el gobierno de Nicolás Maduro colocó el ticket alimentación, que es un bono, por encima del salario, con lo que incumple los parámetros de la OIT”.
Maduro aumentó el ticket de 18.500 a 42.480 bolívares mensuales a partir del 1° de agosto, mientras que el incremento del sueldo mínimo fue de 50%, pasó de 15.051,15 a 22.576,60 bolívares al mes, desde el 1° de septiembre pasado.
Las cifras de la fuerza de trabajo citadas por Guanique son las del Instituto Nacional de Estadística, el cual sitúa a la población económicamente activa en 14 millones de individuos. De ellos, 6,2 millones trabajan en la economía informal y entre un millón y 1,2 millones están desempleados, lo cual implica un ingreso económico intermitente y la exclusión de la seguridad social.
El sindicalista señaló que la información del INE coloca la tasa de desempleo entre 7% y 8% pero, según datos de asesores de las organizaciones sindicales independientes, el índice de desocupación llega a 11,8%.
Refirió que el artículo 91 de la Constitución nacional indica que el Estado garantizará a los trabajadores del sector público y privado un salario mínimo vital que será ajustado cada año, tomando como referencia el costo de la canasta básica. Precisó que de acuerdo con el Centro de Documentación y Análisis de la Federación Venezolana de Maestros se requieren 25 salarios mínimos para adquirirla.
OIT: Se deprime empleo rural
En América Latina uno de cada cinco trabajadores vive en el campo como parte de un mercado laboral caracterizado por más empleo vulnerable, menos trabajo asalariado y una incidencia de pobreza del doble con respecto al de las áreas urbanas, reportó la Organización Internacional del Trabajo.
En América Latina uno de cada cinco trabajadores vive en el campo como parte de un mercado laboral caracterizado por más empleo vulnerable, menos trabajo asalariado y una incidencia de pobreza del doble con respecto al de las áreas urbanas, reportó la Organización Internacional del Trabajo.
Al referirse al informe del organismo “Trabajar en el campo en el siglo XXI en América Latina y el Caribe”, su director regional, José Manuel Salazar, dijo que en las zonas rurales hay menos jóvenes y más adultos mayores, una reducción del empleo agrícola y un aumento de las ocupaciones no agrícolas.
El estudio señala que pese al alza de la productividad en el campo, 56% del empleo rural es vulnerable frente a 27% del urbano. “Hay 52 millones de trabajadores rurales, de los cuales al menos 27 millones están en situación de empleo vulnerable”, agregó.
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